Despertó, estiró las manos hacia arriba,
y mas.
Sintió que iba a tocar el cielo, y fue así.
sus dedos desaparecieron en el azul.
Respiró, y todo el aire que inhalo fue más,
y más claro dentro.
Ese resplandor crecía.
Cuadro surrealista.
Más intensa la realidad interior.
Más intensa la realidad interior.
Ese azul inmenso, hacia las manos,
la ligereza del aire,
iba a transformar lo que quedaba.
Desconocía en sus pies la tierra,
el pulso rítmico, ascendía hacia el iluminado corazón,
Mas intenso sentía, más vibraba.
Un brillo cegó, el resplandor se expandió.
Creció.
Creció.
Sin medidas, la luz,
sin medidas el azul.
Así, era, pero ya sin ser.
Su libertad fue aire y luz.
Todo fue intensidad.