lunes, 19 de octubre de 2015

Valor

Respiro, pienso
-Tiene razón, para que algun comentario; desluciría esta frugal felicidad.
Su amoroso gesto, el ligero detalle, que crece en magia, aún, con errores,
y esta maniática manera de exigir todo.
Que caso tiene esa búsqueda, si te hiere. 
Que caso tiene la perfección, mecánica, y sin alma.
Tu gesto cotidiano me inunda de amor, lo sé. 
Lo veo y ahora me permito esta felicidad.
Nada más.
Nada menos.

El milagro increíble es este pulso que te nombra.

2 comentarios:

Darío dijo...

Si pudiésemos ver el milagro cada día en ese pulso casi imperceptible... UN abrazo.

TORO SALVAJE dijo...

Que milagro tan envidiable.
Tu corazón es muy afortunado.

Besos.